Hoy ha sido un día de malos vientos, de cielo de plomo y de mal sabor de boca.
Nada importante.
Apenas un susto.
A una hora sin determinar, mientras los cuatro miembros de esta familia, dormíamos, unos cacos han entrado en casa.
Se han colado por una ventana abierta y se han llevado tres de los cuatro móviles que a diario pululan por la estantería-librería que abarca de lado a lado el salón.
Los tres estaban en plena tarea de recarga de la batería, descansando, tranquilos, confiados los pobres.
También se han llevado una cámara analógica que era un puro recuerdo sin más valor que el de haber pertenecido a mi suegro y mi antigua Canon 1000D con su estupendo 18/55mm que desde hacía mucho, mucho tiempo no usaba por aquello de trabajar con lo que uno valora como de mejor calidad.
Lástima, la pobre me impulsó con sus buen hacer y su manejabilidad en esto de la era digital.
Son objetos, cosas que se poseen y que pueden ser perfectamente reemplazables. Entidades que ocuparon un espacio en mis manos y en las de mis hijas. Tal vez nada.
Sin embargo hoy ha sido un día de malos vientos, de cielo de plomo y de mal sabor de boca.
Y es que cuando uno realiza día a día un esfuerzo, un gran esfuerzo, para poder poseer estas pequeñas cosas, estos caprichos no del todo inaccesibles pero costosos, al final cuando se hace el vacío, uno se da cuenta de que no es el objeto lo que tiene valor. Lo que realmente vale, lo que realmente cuenta, son los momentos mágicos que se han creado entre estos aparatos y tus manos, entre esos objetos y tu corazón sensible.
Si, nada importante.
Apenas un susto.
Pero la lengua se ensancha hasta no encontrar espacio en la boca, los ojos se van enfebreciendo a costa de una sensación de pena, de lástima puede que mal gestionada pero... intragable.
Nada que decir de ellos, de los que se han llevado esos momentos mágicos.
Nadie a quien culpar. Son cosas que pasan y que no son demasiado graves.
Solo hablo conmigo mismo un poco por desahogo, un poco por alejar ese vacío que hoy me llena (incongruencia de ahora mismo).
Ostras Luis que susto! Me imagino que lo peor sea la sensación de inseguridad....menos esa cámara analógica con valor sentimental lo demás se puede reemplazar.
ResponderEliminarEse cielo no sé si es el plomizo, pero es espectacular!
Un abrazo fuerte para ti y familia
Lo siento, Luis. Con ellos se te fue parte del apego. Se quedan los recuerdos. El mal rato es jodido pero pasará. Todo pasa. Eso me dijo un buen amigo.
ResponderEliminarUn abrazo, Luis.
Confio en que como dice Nuria todo pase y pase rápido, como pasan esas nubes los días de malos vientos, y que todo quede realmente en ese "nada importante".
ResponderEliminarUn abrazo
Diogenes ! El susto tuvo que ser fuerte. Entiendo la situación, aunque se me hace dificil entender el momento.
ResponderEliminarEspero que todo pase pronto.
Hay cielos "plomizos" como dice Fernando pero espero que pronto haya otro día con sol. (plomizos vía email).
Un fuerte abrazo.
Very dramatic picture. I like the dark sky
ResponderEliminarMi dispiace per la triste esperienza che voi avete passato e per la perdita degli oggetti fotografici che avevano un valore non tanto materiale ma affettivo. I tuoi ricordi.
ResponderEliminarÈ la tua foto simboleggia bene la drammaticità di quella giornata, anche se passeggera, come le scure nuvole nel cielo
Saludos.
Marco
Qué mala suerte !!!
ResponderEliminarAl menos todos vosostros estáis bien. Eso es lo más importante, ¿no?
La foto: sensacional.
Un abrazo, Luis.
Que palo... han estado dentro de casa... Dale un poco de tiempo y toma precauciones, todos estáis bien que es lo que importa. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarLuis, comprendo tu preocupación y tu tristeza. Vaya susto, supongo que como dice Ximo lo importante es que los cuatro estáis bien, y entiéndeme cuando digo "estáis bien", porque la cosa es para estar bien jodido
ResponderEliminarAbrazos
Ostras !! Menudo susto !! ... La verdad es que viendo como están las cosas hay que pensar que se han conformado con lo básico y por lo menos estáis bien y no la han tomado con toda la familia.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y mucho ánimo !!
Afortunadamente nunca he pasado por el trago que describes lo que no me impide, por el apego que tenemos a lo nuestro, el valorar el cúmulo de sensaciones que te embargan en ese momento. ¡Vaya"! ahora recuerdo que una vez me robaron el coche...
Ha sido una faena. Posiblemente, la pérdida de información, en los móviles, haya sido lo peor.
Lo importante es que ha sido un robo 'menor', sin violencia.
Me reconforta tu final. Nadie a quién culpar. Son cosas que pasan... es algo que también forma parte de mi filosofía.
Un abrazo Luis.
· LMA · & · CR ·
El valor sentimental del material fotográfico desaparecido es iremplazable aunque estuviera en desuso. A pesar de tu flema británica, supongo que el susto no os lo ha quitado nadie, de todas maneras celebro que la cosa no haya pasado de ahí. Tu reflexión deberia servir como ejemplo de tolerancia a más de uno que ocupa cargo público.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Luis
La foto maravillosa. Lo demás tremendo. No por lo que se han llevado, que también, sino por lo que han dejado: esa sensación de intimidad violada, esa extrañeza de tu propia casa, que de pronto se te aparece poblada por fantasmas. Con el tiempo se pasa y te quedarás con la añoranza de la Canon y las fotos y notas de los móviles. La foto extraordinaria, repito. Un abrazo.
ResponderEliminarQué pena Luis! Un abrazo, por desgracia sé lo que se siente, pero al menos ese genio y esa chispa que se ve en tu foto, permanecen. Ánimo.
ResponderEliminarLuis si solamente fue eso no tiene importancia. ¿Vosotros estáis Bien? pues lo demás es reemplazable.
ResponderEliminarPor cierto, la foto Preciosa.
Vaya Luis, cómo lo lamento :-(
ResponderEliminarAfortunadamente la cosa no se complicó, en estos casos nunca se sabe.
Un fuerte abrazo.
Luis, majo .. bueno ya sabes.
ResponderEliminarUn abrazote para ti y tus chicas.
Vaya, no me había enterado de este "susto" como tú le llamas!!!...he estado muy enfrascado trabajando en un proyecto que, me temo, no va a obtener el resultado que pretendía...hoy todo se basa en lo comercial no en lo humano o espiritual...soy un ingenuo, en fin...
ResponderEliminarA lo que iba...si te sirve de consuelo decirte que viví una experiencia igual hace unos tres años, entraron en nuestra casa mientras dormíamos...todavía hoy me pregunto cómo no me desperté y también doy gracias por no haberlo hecho...soy muy bueno, hasta que dejo de serlo...
A mi también me sustrajeron objetos de valor entrañable...pero, sobre todo, vulneraron algo sagrado...mi hogar!!! Todavía hoy nadie sale de casa ni se va a dormir sin comprobar que está todo bien cerrado, nos obligaron a reforzar nuestras medidas de seguridad, a colocar cierres especiales, etc...nos hicieron perder la tranquilidad...y eso no lo perdonaré jamás!!!
Un enorme abrazo, Luis...y todo mi apoyo para ti y los tuyos, amigo!!! ;)
Ante esta situación uno se queda con una realidad
ResponderEliminarabsoluta; “violación”, destruyendo lo íntimo y personal
atacando tu libertad, en un acto grosero.., indigno…
mala gente, parias.
Paciencia amigo Luis, que el susto se pase pronto, a
seguir bien que al final es lo que cuenta.
Abrazos para todos, Ángel
Lamento lo ocurrido. La sensación de inseguridad que se te debe quedar después de una cosa así debe ser bastante difícil de superar porque una cosa es que te asalten en una calle más o menos solitaria a punta de navaja o de pistola y otra, muy distinta, que se cuelen en tu casa mientras duermes y la desvalijen.
ResponderEliminarEspero que lo superes pronto.
Un abrazo,
Si solo ha sido eso, Luis, dalo por bien perdido. Esta semana pasada nuestra flamante lumix de apenas un año se fue al suelo y sobre ella el pie de Josep. La desolación me duró cinco minutos. La vida es hermosa. Un abrazo, amigo.
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