Tal vez no sea la disciplina en la que más cómodo e inspirado me encuentro pero, el paisaje tiene ese componente por demás vasto que es la posibilidad de la mirada amplia, del horizonte lejano y lleno de pequeños matices que hacen que no solo los pulmones adviertan la pureza del aire, también que algo se reajuste y encuentre su lugar en ese rincón interior que nos hace sentir grandes, casi gigantes precisamente por estar frente a frente a la Naturaleza.
Donde haya luces y sombras te manejas de maravilla...
ResponderEliminarEstupenda Luis
Un abrazo
Gracias Fernando. Con el tiempo se va uno atreviendo a casi todo.
EliminarYo pienso que al contrario, que al estar frente a frente, me hace sentir lo insignificante que soy ante tanta belleza.
ResponderEliminarBonito juego de luces y sombras.
Aferradetes, Luis.
Maneras de sentir. Gracias Sa lluna or pasar por aquí
EliminarMuy buena foto a pesar de salir de tu zona de confort. Me parece oir como las aguas bajan a través de este paisaje mágico.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Luis
Tu lo has dicho Josep. No es mi zona de confort aunque poco a poco tendré que trabajar el paisaje. Sin duda tiene muchas posibilidades fuera de la clásica postal.
EliminarComo somos parte de ella, nos sentimos grandes aunque seamos tan pequeños, pero por sus ríos vamos, por sus paisajes andamos, somos en ella y con ella y cada imagen de ella también nos retrata. Abrazo muy grande, Luis.
ResponderEliminarAsí es como yo lo siento. Gracias y abrazo grande para ti amiga
EliminarNo hay que desdeñar ninguna disciplina. Con esas luces y sombras tan bien administradas el paisaje se ha convertido en mágico.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Antonio. Es cierto no hay que desdeñar ninguna disciplina.
EliminarVeo un paisaje que anda entre el caos y el abandono. Eso es lo que me transmite este paisaje en blanco y negro. Si fuese en color seguro que me diría otra cosa. Lo que si veo son muchos matices y muchos pixeles para observar.
ResponderEliminarSaludos.