Luis, es una imagen que invita a detenerse. Hay algo muy poderoso en esa combinación de redes, estructuras y cuerpos envueltos, como si cada elemento guardara una historia suspendida en el tiempo. La figura humana, casi atrapada entre esas tramas, introduce una tensión silenciosa entre lo que protege y lo que encierra, entre lo visible y lo oculto.
La fotografía tiene un aire casi escultórico, pero al mismo tiempo profundamente humano. Me transmite reflexión, fragilidad y memoria, como si estuviéramos ante un espacio donde las emociones también quedan colgadas, esperando ser leídas.
Una imagen que no se explica de un vistazo, y eso siempre es una virtud.
Luis, es una imagen que invita a detenerse. Hay algo muy poderoso en esa combinación de redes, estructuras y cuerpos envueltos, como si cada elemento guardara una historia suspendida en el tiempo. La figura humana, casi atrapada entre esas tramas, introduce una tensión silenciosa entre lo que protege y lo que encierra, entre lo visible y lo oculto.
ResponderEliminarLa fotografía tiene un aire casi escultórico, pero al mismo tiempo profundamente humano. Me transmite reflexión, fragilidad y memoria, como si estuviéramos ante un espacio donde las emociones también quedan colgadas, esperando ser leídas.
Una imagen que no se explica de un vistazo, y eso siempre es una virtud.
Un abrazo, amigo :)
About to become captive in human cobwebs.
ResponderEliminar¡Qué bella escena!
ResponderEliminarTodos andamos atrapados en algunas telarañas...
Aferradetes, Luis.
Redes, estructuras volantes,... y seguro que en el lado "real" no hay nada de eso.
ResponderEliminarpodi-.