Nervios de hierro que sirvieron para controlar las fuerzas contrarias que empujan el edificio, ahora, barreras de lugares abandonados, ya casi sin memoria, de futuros inmediatos planificados, espacios de tiempo donde reconstruir el pasado o anticipar algún futuro. Una escena caótica, de plano cerrado, que trasmite en un B&N luminoso y nítido el languidecer de un edificio que fue útil. Estupenda fotografía. Abrazos.
Buen trabajo el de este proyecto tuyo, Luís. Veo que en la siguiente sigues con tomas exteriores, no se si tenías acceso al interior, en todo caso, creo que mas de uno de nosotros esperamos tomas interiores, inevitable...
Estos hierros retorcidos tienen un atractivo visual único. La composición es magnífica y el B/N impecablemente equilibrado.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Luis
Buena imagen con ese cerramiento forzado que refuerza la idea de abandono
ResponderEliminarUn entramado de hierros a modo del cierre que hace que te preguntes qué impide, la entrada o la salida.
ResponderEliminarUn abrazo,
Buen trabajo de procesado de ese abandonado hospital y que por cierto no conocía su existencia.
ResponderEliminarNervios de hierro que sirvieron para controlar
ResponderEliminarlas fuerzas contrarias que empujan el edificio,
ahora, barreras de lugares abandonados, ya
casi sin memoria, de futuros inmediatos
planificados, espacios de tiempo donde
reconstruir el pasado o anticipar algún futuro.
Una escena caótica, de plano cerrado, que
trasmite en un B&N luminoso y nítido
el languidecer de un edificio que fue útil.
Estupenda fotografía.
Abrazos.
Una imagen muy gráfica del estado del conjunto. Luís, has aprovechado estupendamente esos hierros retorcidos.
ResponderEliminarSaludos
Buen trabajo el de este proyecto tuyo, Luís.
ResponderEliminarVeo que en la siguiente sigues con tomas exteriores, no se si tenías acceso al interior, en todo caso, creo que mas de uno de nosotros esperamos tomas interiores, inevitable...