2 de marzo de 2016

La fotografía como memoria y VII




   Y para finalizar este trabajo... un poco de lucha de clases.
   El tiempo, ese viento imperceptible que todo lo desgasta a su paso, en ocasiones también nos deja al descubierto las diferencias sociales y nos permite comprobar cómo la vida no es igual para todos, según de quien se trate.
   Las ruinas son, han sido y serán, para aquellos que se dejan la vida en su trabajo gracias al cual sobreviven. 
   Los que dan esos trabajos “ruinosos” se parapetan contra el olvido y el paso del tiempo, logrando perdurar.
   Estas últimas fotos, bien lo demuestran.

   La casa del Patrón se mantiene prácticamente intacta en su construcción mientras las de los trabajadores apenas mantienen un recuerdo de aquello que fue. Hoy solo son un montón de piedras que han dejado evaporarse las vidas de quienes las construyeron con sus propias manos.
Gracias a todos por vuestros comentarios. Un abrazo